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LA IMPORTANCIA DE CUIDAR Y PROTEGER NUESTRA ENERGÍA
Muchas veces en la consulta llegan personas con un gran cansancio y con la sensación de que las cosas parecen estar costándoles demasiado. Cuando les consulto sobre dónde han estado, con quién se han relacionado o los conflictos que han presentado es indudable que no han sido conscientes del desgate energético que han padecido
Es más, muchos de nosotros ni siquiera somos conscientes de las emociones que nos atacan o sembramos día a día.
Este desgaste se incrementa aún más si eres una persona sensible energéticamente. A diario me llegan consultantes que tienen una alta capacidad de percepción pero desconocen estrategias para protegerse de influencias exteriores negativas e incluso no saben cómo recuperarla.
Muchos especialistas vinculados a la salud mental desconocen la importancia de cuidarse y protegerse del impacto emocional y energético, y por lo mismo esta dimensión tampoco la consideran en las patologías de sus pacientes.
De este modo, me he encontrado con casos de depresión y crisis de angustia que en parte son explicados o potenciados por impactos en el campo áurico de esa persona.
Por esta razón, conocer tu energía y darte cuenta como se va modificando en el día a día por diferentes situaciones es una tarea que requiere consciencia y autoconocimiento.
He escuchado a muchas personas que todo los explican en base al «mal de ojo», pero a veces basta que una persona sostenidamente piense en nosotros desde la rabia y nosotros estar debilitados energéticamente para absorber esa vibración. O estar en espacios de dolor, triteza, muerte, pánico o estrés para vernos afectados.
La emociones mal llamadas «negativas» son parte de nuestra vida, lo complejo es no saber soltarlas y mantenerlas largo tiempo en nosotros pues consumen gran parte de nuestra energía pudiendo absorberlas completamente.
Para poder combatir la debilidad energética, existen muchos caminos, técnicas y tradiciones espirituales. Lo importante es que escojas la que calza con tus creencias y comodidad. Y si sientes que estás en una situación que escapa de tus manos, es muy importante la prontitud de la ayuda de un tercero porque podemos estar frente a entidades que ya no puedes manejar a voluntad.
Te recomiendo que pruebes con alguna de estas posibilidades:
- Mejorar tu nutrición. Ej disminuir consumo de alcohol y carne
- Protección mediante piedras o gemas como turmalina negra entre otras
- Meditación diaria o lo más permanentemente posible
- Oraciones relacionadas con arcángeles y ángeles
- Trabajo con rayo violeta y activación de glándula pineal
- Lecturas de algunos pasajes de la biblia si eres cristiano
- Acceder a terapias como Reiki, Sanación cuántica, o cualquier otra que limpie cuerpos sutiles y chakras
- Música de alta vibración en los espacios que frecuentes
- Palo santo, incienso y copal
- Limpiar tu casa y espacios de trabajo (para eso existen innumerables técnicas)
- Reflexionar sobre tus relaciones y vínculos y cómo éstos te quitan energía
Cualquiera de estas alternativas puede ayudarte, lo importante es hacer el cambio e incorporar herramientas que siempre te mantengan en un estado de alta vibración y fortaleza energética. Recuerda que somos cuerpo, mente, emoción, energía y espíritu, por lo que nuestras problemáticas son multifactoriales y es importante explorar todas las dimensiones que te lleven a tu sanación.
Paola Castillo R.
Psicóloga U.C., Terapeuta Floral, Maestra de Reiki, Master en PNL y Coach de Vida
paola.castillo@bienestarhumano.cl
